Improving the Audio Guide: A Look at Our Visitors. MET article.

First impressions.

The Audio Guide is a long-standing service at the Museum with over three thousand audio messages attracting 250,000 users annually. It offers six to eight special exhibition tours and can be accessed in up to nine major foreign languages. In September 2013, the Museum launched a new version of the Audio Guide complete with a redesigned interface and repackaged content. This presented a fresh opportunity for us to take a more strategic look at the Audio Guide and see how well it has performed since its rebirth.

In the summer of 2014, I worked with a team of consultants from Frankly, Green + Webb to conduct a comprehensive evaluation of the Audio Guide here at the Met (both at the Main Building and at The Cloisters). Below, I will explore some of our key findings and explain how the Museum is moving forward with the results of this research.

The Audioguide as a Service

It's always tempting to think of an Audio Guide as an old-fashioned product that visitors can hold onto and carry with them throughout the Museum if they feel like it, but this perspective is simply too limited. Instead, the Audio Guide should be seen as a service that is a crucial part of the museum experience and one that combines both the digital and nondigital within the physical space of the Museum.

This perspective, popularly known as "service design," is a way of creating and improving experiences (instead of stand-alone products) in order to better meet visitor needs within a specific context. It requires an understanding of the user's full experience (also known as the "user journey") in a robust way—from initial awareness of the offer to the full impact of the offer.

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Grace Tung, Digital Media Associate, Creative Development, Digital Media

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Curiosidades sobre el Museo del Prado - Madrid - España

1. ¿El Guernica estuvo en el Prado?

Así es. El Guernica fue un encargo del Gobierno de la República para la Exposición Universal de París de 1937. Tras su clausura, inició un periplo por diferentes países. Primero, su creador decidió que se custodiase en el MoMa de Nueva York hasta que España recuperase un sistema democrático. Finalmente volvió a España en 1981, y se expuso en el Prado, en el Casón del Buen Retiro, hasta 1992, cuando se trasladó al recién creado Museo Reina Sofía.

2. Un retrato de cine

En torno a 1902, el escultor Mariano Benlliure realizó un busto de Goya inspirado en el retrato que el pintor le había hecho a Vicente López. Este mismo busto, conservado en el museo, sirvió de inspiración para elaborar el galardón que hoy se entrega a los premiados en la gala de los Goya del cine español.

3. ¿Un regalo de Franco a Hitler?

Hay que decir que esto es una leyenda, pero podría tener visos de realidad. Se dice que la obra La marquesa de Santa Cruz fue comprada por el dictador Franco para regalársela a Hitler durante su entrevista en Hendaya. En el instrumento que porta la marquesa muchos creen ver dibujada una esvástica.

4. El retrete de Fernando VII

La que hoy es la sala 39 del Museo Del Prado fue, en el siglo XIX, el Gabinete de Descanso de Sus Majestades. Esta era una sala que incluía un pequeño cuarto destinado a la higiene de los reyes, que se llamaba “retrete de su Majestad en el Real Museo”. Hoy, este espacio conserva el suelo de mármol y unas pinturas murales decorativas.

5. El tosión de oro

El tosión de oro es una insignia consistente en un carnero de oro que cuelga de un collar. Pertenecía a una orden de caballería instituida por Felipe el Bueno en 1430. Finalmente, acabó recayendo en Carlos V y quedó vinculada a La Corona española. Así, en el museo es posible encontrar este torsión de oro en varios cuadros que representan a la familia real.

6. Las obras más pequeñas de El Prado

En el Museo del Prado podemos encontrar una colección de miniaturas. Estas son pinturas de pequeño tamaño, entre los 20 y los 200 milímetros, que solían representar retratos y que servían de regalo entre las cortes europeas.

7. Rubens y la astronomía

Rubens plasmó en sus obras algunas de las revolucionarias observaciones del cielo realizadas por Galileo. Por ejemplo, el fondo celeste de ‘El nacimiento de la Vía Láctea’ refleja la multitud de estrellas de la galaxia que habían pasado inadvertidas hasta entonces. Además, en ‘Saturno devorando a sus hijos están incluidos tres cuerpos brillantes, como los que observó Galileo al apuntar con su telescopio hacia este planeta anillado.

8. ¿Sabías que El Prado no tiene sala 13?

Junto a la sala 12, dedicada a la pintura de Velázquez, no fue incluida la sala número 13 debido a la superstición. Por este mismo motivo, la fobia o el miedo irracional al número 13, tampoco encontramos el autobús 13 en El Centro de Madrid, y este número de asiento era sustituido por el asiento 12 bis en los aviones.

9. El Prado en llamas

El 25 de noviembre de 1891, Mariano de Cavia relata en el periódico El Liberal un incendio que habría destruido la mayor parte de obras del museo. Muchos madrileños acudieron al paseo Del Prado para comprobar que no había tal incendio; sino que era una invención del autor para denunciar el abandono de las instalaciones.
El Prado sí sufrió un incendio, conocido como el incendio de Alcázar, durante la Nochebuena de 1734. Uno de los cuadros que más daños sufrió fue El Triunfo de Baco, de Ribera, que quedó dividido en 3 fragmentos, y hoy se exponen 2 de ellos.

10. La falsa Gioconda

En 2011 se descubrió en El Prado un interesante fondo tras el barniz de la "falsa Gioconda", que podría haber sido pintada en el estudio de Leonardo da Vinci a la vez que la "original" que conserva el museo francés del Louvre. Todo apunta a que se trata de una réplica pintada por uno de los pupilos favoritos de Leonardo.
Y estas son algunas de las muchas curiosidades del Museo Del Prado, que lleva 200 años albergando una de las colecciones pictóricas más importantes de la humanidad, y que está estrechamente ligado a la historia de España. ¿Cuál de estas te ha parecido la más curiosa?
Fuente:  Muy Interesante : Enlace aquí

¿Volviendo “políticamente correctos” a los museos del mundo?

¿Volviendo “políticamente correctos” a los museos del mundo?

Si se aprueba el nuevo concepto en la Asamblea General Extraordinaria del ICOM que se celebrará en Kioto (Japón) el próximo 7 de septiembre, de ahora en adelante los museos serán “espacios democratizadores.

El portal especializado en el mundo del arte y los museos Hyperallergic, publicó recientemente un artículo en el cual señala que la nueva definición de “museo” que el Consejo Internacional de Museos (ICOM) votará en septiembre, ha desencadenado el debate internacional. Y con justa razón.

 

¿De qué se trata la nueva definición?

El cambio propuesto en la agenda del ICOM incluye, dentro de los museos, un lenguaje sobre “justicia social, igualdad global y bienestar planetario”. Los críticos dicen que el texto es demasiado político para la mayoría de los museos del mundo, que se contentan con exhibir piezas importantes de la civilización y guardar memoria de la humanidad.

Hyperallergic comenta que durante casi 50 años, el ICOM ha definido el museo como “una institución sin fines de lucro” que “adquiere, conserva, investiga, comunica y exhibe el patrimonio tangible e intangible de la humanidad y su entorno, con fines educativos, de estudio y disfrute”.

Pero una versión actualizada de la definición incorporaría la mención de “dignidad humana y justicia social”, referencias que han dividido a los 40.000 profesionales del ICOM, mismos que representan a 20.000 museos de todas las ideologías.

 

El idioma del siglo XXI

Hace un par de semanas, 24 ramas nacionales del ICOM, incluidas las de Francia, Italia, España, Alemania, Canadá y Rusia, solicitaron un aplazamiento del voto oficial de la revisión para presentar una nueva propuesta ante la presentada por la curadora Jette Sandahl, quien sugiere que la definición actual “no habla el idioma del siglo XXI” al ignorar las demandas de “democracia cultural”.

Si se aprueba el nuevo concepto en la Asamblea General Extraordinaria del ICOM que se celebrará en Kioto (Japón) el próximo 7 de septiembre, de ahora en adelante los museos serán “espacios democratizadores, inclusivos y polifónicos para el diálogo crítico sobre el pasado y el futuro”.

Además, “reconociendo y abordando los conflictos y desafíos del presente, mantienen los artefactos y especímenes en confianza para la sociedad, salvaguardan diversos recuerdos para las generaciones futuras y garantizan la igualdad de derechos y el acceso al patrimonio para todas las personas”.

En resumen, la propuesta de Sandahl es que si bien los museos no tienen fines de lucro, a partir de ahora deberán ser “participativos y transparentes”; trabajar en asociación activa con y para diversas comunidades para recopilar, preservar, investigar, interpretar, exhibir y mejorar la comprensión del mundo, con el objetivo de contribuir a la dignidad humana y la justicia social, la igualdad global y el bienestar planetario”.

 

Ideología de museo

Varios miembros del ICOM y autoridades museísticas internacionales han reparado, rápidamente, en el carácter “ideológico” de la propuesta, mientras que la mayoría la encuentra bastante confusa, exagerada y que confunde museos con centro culturales, bibliotecas o laboratorios.

En otras palabras, los críticos de la nueva definición de museos consideraron que “es demasiado política y demasiado vaga” para definir estos espacios que, desde 1683, cuando la Universidad de Oxford decidió mostrar al público una colección privada de curiosidades de la historia en lo que era el Museo Ashmolean, han gozado del interés de personas de todas las edades… y las han educado.

Con información de Hyperallergic: https://es.aleteia.org/2019/08/21/volviendo-politicamente-correctos-a-los-museos-del-mundo/https://hyperallergic.com/513858/icom-museum-definition/

Con información de Hyperallergic: https://hyperallergic.com/513858/icom-museum-definition/